Todo lo que Anabel Gutiérrez tuvo que soportar de Florinda Meza

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Siempre alejada de los conflictos, Anabel Gutiérrez no escapó de la polémica cuando denunció publicamente a Florinda Meza, con quien compartió créditos en el programa de Chespirito en los años 80s y 90s.

Fue en la revista TvyNovelas que la actriz platicó de aquella época en la que la viuda de Roberto Gómez Bolaños la menospreció como actriz, sus desplantes y hasta la vez que Emilio Azcárraga Milmo tuvo que intervenir para arreglar las cosas entre ambas.

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Anabel Gutiérrez junto a Pedro Infante y Miroslava. Foto: Archivo Televisa

Anabel Gutiérrez, la actriz que creció y se crió tras bambalinas

Aunque muchas de las nuevas generaciones no saben la trayectoria de Anabel Gutiérrez, la realidad es que la actriz contaba con una amplia carrera artística. De hecho, se crió y creció tras bambalinas. Su papá fue actor y su mamá una experta bailarina que perteneció a la compañía teatral de las hermanas Blanch.

No solo eso, sus abuelos paternos también fueron parte de la comunidad artística de su época, pues su abuelo Miguel Gutiérrez era una afamado empresario teatral que se casó con la cantante de ópera Soledad Goyzueta. Mientras que sus abuelos maternos no se quedaban atrás, su abuelo fue actor y su abuela una gran cupletista.

Cuando ella creció formó parte de la generación de grandes actrices de la Época del Cine de Oro Mexicano, incluso su debut estuvo amadrinado por nada más y nada menos que la gran actriz Dolores del Río, así como por Sara García, Joaquín Pardavé y los hermanos Soler, entre otros.

Dolores del Río la amadrinó en la película Deseada (1951). Foto: Archivo Televisa

Su llegada a Chespirito

Fue en 1987 cuando en la pantalla chica pudimos ver a Anabel como María Espotaverderona Torquemada y viuda de Lascurain, mamá de la Chimoltrufia. Pero la decisión de meter a la experimentada actriz al sketch de Los caquitos no fue bien recibida por Florinda Meza, quien pronto comenzó a ‘humillarla’, según contó la revista TvyNovelas.

"(La oportunidad)Me la dio Roberto. Lo conocí cuando trabajé en la película Angelitos del trapecio (1959), cuyo argumento él escribió; años después me invitó a interpretar un personaje en el programa Chespirito. Me dijo: “Si te gusta, lo haces; si no te gusta, me lo dices”. Ya en Televisa me dijo: “Ve a vestuario a escoger tu ropa”. A mí me encantaba La Chimoltrufia, entonces me vestí igualito a ella... Ya grabado el programa, me preguntó: “¿Qué pasó?”. Le contesté: “¡Me encantó!, y me dijo: “Te quedas”, y me quedé. Roberto era un pan, un hombre maravilloso... Conmigo fue una lindísima persona, igual que María Antonieta, Édgar... Todos menos...”, explicó en entrevista con el programa 24xsegundo conducido por Óscar Uriel y Gaby Meza, de los canales De película y Golden.

Pese a la soberbia de Florinda Meza, Anabel Gutiérrez interpretó al simpático personaje por más de una década. Foto: Archivo Televisa

“Yo hacía muchos corajes con una persona. Ese era el problema que había con ella; no digo que sea mala persona, pero tenía un carácter muy difícil. El día que me llamó Roberto, Florinda (Meza) me dijo: “Te voy a llevar al camerino”. Dije: “¿A mí, al camerino? ¿Para qué, Florinda?”. “Para enseñarte a ser actriz”, respondió. Le dije “¡Ah!”. “Bueno, actriz eres de cine, pero de televisión no”, aclaró, y le pregunté: “¿Cuándo quieres que vaya al foro?”, y que la oye don (Emilio Azcárraga) Milmo. Yo nunca he dicho que sea actriz; yo era muy buena como chamaca, pero actriz dramática no. Podía hacer todo, pero nunca me consideré una gran actriz. Me dolió su comentario porque dije: “¿Tantos años de carrera, tanta profesión y todo, y que me vengan a decir: ‘Te voy a enseñar a actuar?’”. Los sábados me iba con mi papá al teatro de comedia, los domingos iba a ver a mi mamá en la zarzuela y mi historia empezó a escribirse en teatro con Andrea Palma, Julio Bracho...”, recordó en aquella entrevista.

La actriz falleció la tarde de este domingo 21 de agosto en Puebla, a la edad de 89 años de edad. El próximo 5 de septiembre hubiera celebrado sus 90 años de vida. Descanse en paz.