Hasta ahora, el reality show basado en ‘El Juego del Calamar’ ha generado más polémica por lo que sucedió detrás de cámaras que por lo que sucede frente a ellas.
Parece que ‘El Juego del Calamar: el desafío’ se pasó de la raya. (Cortesía Netflix)
En ‘El Juego del Calamar‘, la serie surcoreana de Netflix que causó sensación en 2021, un grupo de personas desesperadas compite en un juego mortal por un premio que promete sacarlos de la pobreza. Sin embargo, el reality show basado en este programa dio un giro inesperado pero interesante: antes de que llegara a las pantallas ‘El Juego del Calamar: el desafío’, algunos participantes decidieron demandar a la producción.
Al igual que en la serie, en el reality solo puede haber un ganador y compiten 456 personas por un premio de 4.56 millones de dólares. Dado que se trata del reality show con la recompensa más grande de la historia, parece que la producción quiso llevar las cosas al extremo. Aunque los concursantes no estaban arriesgando sus vidas, se produjeron lesiones debido a las condiciones extremas en las que vivían durante el rodaje.
Una firma de abogados británica especializada en lesiones laborales en producciones cinematográficas y televisivas está representando a dos participantes, quienes prefirieron mantener sus nombres en anonimato. Estos concursantes reportaron casos de hipotermia y daño neurológico durante la filmación en temperaturas excepcionalmente bajas dentro del Reino Unido.
Según varios concursantes, la producción los ha obligado a participar en condiciones climáticas adversas y sin contar con la presencia de paramédicos que pudieran atenderlos en caso de accidentes, situación que desembocó en la demanda presentada por parte de los participantes.
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Algunos participantes han comentado a diversos medios que algunas filmaciones se llevaron a cabo al aire libre durante un frente frío. Además, cuando no estaban participando en los juegos de la serie, los concursantes se encontraban incomunicados con el exterior y solo recibían alimentos cuando los guardias les servían sus raciones, tal como sucedía en ‘El Juego del Calamar’.